Amo mis anteojos
no porque parezcan de aviador
si no que siempre me acompañan,
están conmigo mientras camino
leo y escribo.
Que sería yo sin ellos en mis ratos de espionaje
mientras corro, mientras me escondo
y son ellos los que me avisan
de algún modo o a su modo.
Ellos me lo dijeron todo
no solo me tocaron o las tocó mi mano
si no que acompañaron de tal modo mi existencia
que conmigo existieron
y fueron para mi tan existentes
que vivieron conmigo media vida
y morirán conmigo media muerte.
Solo quiero que el día de mi muerte
me entierren con mis lentes.
1 comentario:
Sobre todo q te ha permitido ver...
aunq no necesariamente conocer
Publicar un comentario